El envasado en atmósfera protectora es una técnica innovadora que está cambiando la forma en que conservamos nuestros alimentos. Pero, ¿alguna vez has oído hablar de ello? Imagina abrir un paquete de alimentos y encontrar la indicación «Envasado en Atmósfera Protectora». Seguro que te has preguntado qué significa y cómo funciona. ¡No te preocupes! En este blog, te contaremos todo.

El envasado en atmósfera protectora (MAP) es una técnica de conservación de alimentos que nos permite retrasar su degradación natural. ¿Cómo lo logra? Alterando la composición de los gases dentro del envase, reduciendo la cantidad de oxígeno y ajustando los niveles de humedad. De modo que ralentizará el crecimiento de microorganismos y minimizará las reacciones de oxidación, manteniendo la frescura y las propiedades organolépticas.

¿Pero dónde se aplica esta técnica? ¡En una amplia variedad de productos! Desde frutas y verduras hasta carne, pescado, lácteos y productos horneados, el envasado en atmósfera protectora se ha convertido en una herramienta fundamental en la industria alimentaria para garantizar la calidad y seguridad de los alimentos que consumimos a diario.

El uso de nitrógeno en la industria de la alimentación permite conservar los alimentos y minimizar las reacciones de oxidación

El oxígeno, esencial para la vida, es también un catalizador de la degradación de alimentos. Al reducir su presencia en el envase, podemos prolongar la vida útil del producto sin comprometer su sabor ni su aspecto. Por tanto, el envasado en atmósfera protectora no sólo nos brinda una mayor durabilidad, sino también la garantía de alimentos frescos por más tiempo.

¿Cómo las empresas logran reducir la concentración de oxígeno dentro de un envase?

Hay varias alternativas, pero una de las más efectivas es sustituir al oxígeno, que es vital para la vida, por nitrógeno, un gas inerte.

El nitrógeno (N2) es el principal componente de la atmósfera protectora. Como gas inerte, el N2 es imprescindible para evitar la oxidación de los alimentos e inhibir el crecimiento de microbios y otros microorganismos, garantizando la conservación de los alimentos así como el mantenimiento de su aspecto y propiedades organolépticas.

Producción de tu propio nitrógeno in situ

En el panorama cambiante de la industria alimentaria, la sostenibilidad se ha convertido en un aspecto clave tanto para las empresas como para los consumidores. Por eso, desde GasN2, apostamos por prácticas más respetuosas con el medio ambiente. Hemos desarrollado tecnologías innovadoras que permiten a los proveedores de alimentos producir su propio nitrógeno in situ. Esta solución no sólo proporciona una fuente fiable de nitrógeno, esencial para diversas aplicaciones en la industria alimentaria, sino que también tiene un impacto positivo en la sostenibilidad.

Al eliminar la necesidad de depender de suministros regulares de gas en forma de botellas o tanques, las empresas pueden reducir la huella de carbono al minimizar el transporte y almacenamiento de estos gases. Además, al producir el nitrógeno en el sitio, se reduce la dependencia de recursos externos y se promueve la autonomía y la eficiencia en la cadena de suministro.

En último término, la implementación de estas tecnologías sostenibles no sólo beneficia al medio ambiente, sino que también puede resultar en ahorros significativos para las empresas a largo plazo.

En resumen, el envasado en atmósfera protectora es una herramienta indispensable para la industria alimentaria. Esta técnica revolucionaria ha demostrado ser altamente efectiva en la conservación de alimentos, prolongando su vida útil y manteniendo su calidad, sabor y textura.